
En la entrada de la catedral de Mtskheta hay una estupenda oficina de información turística (la primera que veo) con unas guapas señoritas y muy azafatas, pero que apenas hablan inglés.
(more…)En la entrada de la catedral de Mtskheta hay una estupenda oficina de información turística (la primera que veo) con unas guapas señoritas y muy azafatas, pero que apenas hablan inglés.
(more…)Dice la guía (papel) que Wulong es un lugar que está “fuera del mapa” de los viajeros extranjeros, pero que es un lugar fantástico para experimentar el agreste paisaje de sus profundos desfiladeros cortados en montañas de espesos bosques, mientras blancas cascadas de agua se zambullen en poderosos ríos y escarpadas formaciones calizas de tipo kárstico se levantan hacia el cielo.
Ya ves todo lo que dice y lo precioso que esperas que sea.
Dàzú Buddhist Caves.
Así las llama la guía aunque Wikipedia las denomina en castellano “Esculturas rupestres de Dazu”, en inglés “Dazu Rock Carvings” y en pinyin “Dàzú Shíkè”. Te dejo todas las denominaciones por si tienes interés en buscarlas en la web.
Esta tarde tenemos programada una vista a la “Ghost City” en Feng Du. Y como siempre a nosotros nos tratan con especial deferencia pues no hacen pasar los primeros.
En cuanto sales el barco para las excursiones te fotografían. El de hoy llevaba un vistoso chaleco con este eslogan: “Fotógrafo del crucero. Sigue sonriendo”.
Llegamos a la entrada de la “West Scenic Area”, Xizha, y al ir a sacar los billetes nos mandan a una ventanilla donde la joven habla inglés. ¡Por fin! Buda y Mao sean alabados.
Me apresuro a explicarle con el pasaporte lo mayores que somos y efectivamente tenemos un precio especial: de 150¥ a 100¥, lo que para el nivel de vida de este país me parece bastante caro: 20€ para el billete normal. Ten en cuenta que a diferencia de otros países asiáticos, excepto Japón y Corea, pero especialmente en la India, aquí no hay diferencia de precio entre los nacionales y los extranjeros. Creo que sí encontré el año pasado que algún descuento de mayores no se aplicaba a los extranjeros, pero por lo menos no te crujen como los indios.