56. Sri Lanka 2014. Trigésimo día de viaje. 24 de octubre, viernes. De Galle a Colombo.

by

Sri Lanka. Galle. Fort. All Saints'Church.

Anoche Marisa recibió una invitación para ir a Formosa con gastos pagados. ¡Formosa! No oía esta palabra desde mi infancia en el colegio de los Padres Escolapios. Se hablaba del Generalísimo Chank Kai Check y de Formosa. Debía ser muy bueno o por lo menos parecerlo a lo ojos de la Iglesia  y de nuestro Generalísimo. No recuerdo si rezábamos por él como por “nuestro arzobispo Morcillo” pero igual sí. ¡Vaya nombre curioso para una autoridad eclesiástica!

Pues hoy invitan a Marisa a disertar en la defensoría general de la nación sobre la salud mental. Y es que debe ser un sinvivir tener que acudir a tantos sitios o quedar mal con tanta gente.

Marisa, “mi Marisa”, no la de Formosa,  está cansada de decir  que ella no es ella, que realmente ella es ella. Quizás tuviese que pedirle a la Sra. Cospedal que lo explicase.  Pero es que le mandan currículos y citas para sesiones académicas. Porque la otra será una eminencia pero de correo electrónico no sabe nada. ¡Mira que dar como tu dirección de correo  el de otra persona! Con lo fácil que es enviarte una nota a ti mismo y darte cuenta de que nunca te llega…Por si eres uno de estos: ten presente que “gmail” no discrimina a los usuarios con punto entre las letras y sin punto: “mariano.rajoy” es lo mismo que “marianorajoy”.  Te advierto que ya está cogido.

Lo peor de todo es que cada vez que  Marisa recibe una nota le contesta al que la envía que ella no es “ella”, pero nadie le devuelve la nota con un “gracias”.  Unos bordes.

Pues cuando oí la palabra Formosa después de cincuenta y tantos años de no oírla el cerebro empezó a hacerme algo raro. Es como si se abriesen las sinapsis que estaban cerradas desde hacía mucho tiempo. Debió ser como lo de Rosebud.

Amanece un día estupendo. Parece que hoy no lloverá pero ya nos marchamos de esta ciudad.

El joven que nos sirve el desayuno  me dijo cuando llegamos que él era el hermano de la dueña del hotel, quizás para marcar su estatus como alguien superior al resto de los empleados pues en este hotel la familia vive en él.  Todos los días al servirnos el desayuno nos pregunta por nuestros planes e intenta vendernos algún viaje o llevarnos con su tuktuk a algún sitio.  Y  todos los días me logro zafar de él como puedo.  Pues bien, en todos los hoteles  donde hemos desayunado  han comenzado con un plato de fruta o un vaso de zumo y luego ha venido el resto, pero aquí nos lo sirve cuando ya hemos acabado todo.

Sri Lanka. Galle. Fort.

Intento decirle al cuñado que nos sirva primero la fruta. Imposible.  Y mira que es fácil de decir y de entender.  Le explico el orden: “omelette, toast, butter, jam, tea, fruit. No”. “Please, First fruit”.  Pues no lo entiende.  A lo mejor cree que lo de “First fruit” es un slogan de vida saludable. Total, que ni puto caso.

Sale un chino a desayunar al jardín y le pregunto si sabe el porqué de la abundancia de sus connacionales. No lo sabe. Pero me confirma que ahora no son vacaciones en China.  Le sigo preguntando pero patino en mi exposición y empieza a contarme lo que le cuesta el viaje. “No, no, que no te pregunto eso”. Y es que me ha dado mucho apuro esa intromisión en su presupuesto, no que no me interesase.  Solo quería saber cuánto tiempo suelen estar: 15 días. O sea como la mayoría de occidentales que hemos encontrado.

Y encima muy educado se disculpa por su inglés. ¡Ya me gustaría hablar su nivel en chino!

Ayer le pregunté a la señora del hotel  el nombre de una especie de coco que había encontrado en la playa. Nada más verlo me dijo con premura: “Don’t eat!”.  Pero no logré enterarme del nombre. Hoy al pagar la cuenta  le vuelvo a preguntar y me vuelve repetir lo de “don’t eat”.  Me debe ver como a un joven alocado. O sea que yo voy paseando por la playa, me encuentro un extraño fruto parecido a un coco y lo primero que voy a hacer es comérmelo como si fuese un náufrago que lleva  dos semanas en ayunas.

Sri Lanka. Weligama. Diya kaduru.

Pero en este hotel hemos estado muy bien, incluyendo el adorno de la cama cuando llegamos, que aunque eso no se come era una monada, que hasta te daba pena echarte en la cama o utilizar la toalla.

Sri Lanka. Galle. Fort.

Nuestro tren sale para Colombo a las 10:55 así que nos queda tiempo  y vamos a una sesión fotográfica a la iglesia anglicana.  Ayer Marisa repasando las fotos descubrió que las vidrieras eran preciosas y parecían hechas por algún artista  prerrafaelista británico.  Incluso hay dos cabezas  de ángeles que corresponden a dos buenos amigos del artista pues no son convencionales sino reales.

Sri Lanka. Galle. Fort. All Saints'Church.

En nuestro último paseo por las calles del fuerte de Galle veo unas cuantas ofertas inmobiliarias. Por si te interesan: tienes una propiedad de 62 perches con casita por  165 mil dólares, pero está 3 km tierra adentro. Otra de mejor aspecto y de 100 perches por 340 mil dólares, pero está a 20 minutos del fuerte. Otra entre medio: por 250 mil dólares de 66 perches y a solo 5 km del fuerte y restaurada. O sea que no están mal. Solo falta saber qué es eso del perche. Más de 25 metros cuadrados

Vemos un letrero de Yala: allí aparecen todos los animales que no vimos.

Sri Lanka. Galle. Fort.

Aunque los viajes en tren por la tierras altas los hicimos en tercera clase y  fueron muy cómodos aquí hemos sacado segunda para ver esa clase y porque el viaje dura dos horas.  Pues menos mal porque aquello ha sido “al abordaje”. Que casi parecía la India. A lo peor no son tan diferentes. Nos hemos podido sentar pero separados y sin ventanilla. A las dos horas llegamos a Colombo.  En la estación vemos a dos viajeros occidentales con una tabla de surf. Uno aún lleva mochila por lo que tiene las manos libres para la tabla pero el otro lleva una enorme bolsa que va arrastrando como puede. Debe tener todavía menos sentido común que el otro. ¿Cómo se desplazará?

Sri Lanka. Colombo.

Sri Lanka. Colombo.

PD.

Marisa volvió a leer lo de Formosa y entonces caí  que debe ser una ciudad argentina con ese nombre y no Taiwán.

 

Etiquetas: , ,