Sobre los priapoideos.
En mi crónica anterior escribí sobre las holoturias y los priapoideos. La verdad es que no lo tenía muy claro y los busqué en Google. Nada de nada, además de que “Word” no reconoce esta palabra. Así que he acudido a un amigo científico marino, Miquel Alcaraz, que me ha sacado de dudas:
“Aunque a las holoturias (equinodermos, como los erizos de mar o las estrellas) se las llama en Baleares «Pardal de moro» (clarísima alusión a su forma, tamaño y color, el pardal en mallorquín es el pene) los priapulidos o priapuloideos son, como nos explicó Gadea, un orden de gusanos que tienen todavía más aspecto de pirula.
De las holoturias, en Catalunya se comen las cinco bandas musculares. Rebozadas y fritas o a la plancha. Se llaman «espardenyes» y son deliciosas. En oriente se llaman «trepang» (ver Emilio Salgari en alguna de sus novelas). Yo he comido el trepang, nada que ver con las Espardenyes. El trepang es la holoturia entera, seca o salada, luego cocinada. Tiene textura de neumático de coche. Esto es todo lo que sé de las holoturias, además de que cuando las molestas evaginan el intestino”.
Aprovecho para dejarte un enlace a su blog con preciosas acuarelas que te recordarán a las de la expedición de Malaspina.
Etiquetas: Japón
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